El intercambio de beneficios sociales no es exclusivo de los humanos. En el mundo animal existen -en numerosas especies- una multitud de oportunidades de intercambio social, tal es el caso de la cooperación. Diversos modelos han sido desarrollados a propósito y nuevas formas de acercarse al tema son implementados por ecólogos de la conducta alrededor del mundo. Incluso algunas teorías económicas permearon (exitosamente) en la biología, tal es el caso de la teoría de los mercados biológicos. Según dicha teoría los actos cooperativos son “mercancías” que pueden ser intercambiadas de acuerdo con la oferta y la demanda ejercidas por las clases participantes. Algunos estudios han explorado dicha propuesta y se ha encontrado –de formas simples y elegantes- que los mercados biológicos parecen existir en el mundo animal. Por ejemplo, en un mercado biológico relacionado con la reproducción machos y hembras representarían las clases involucradas. En aquellas especies donde existe fertilización interna, las hembras serían la clase en desventaja. Es decir, el costo de una cópula –por la consecuente preñez- sería mayor para ellas tanto en recursos como en tiempo. Entonces, dado que las hembras serían las poseedoras del gameto valioso también podrían ser las que pudieran obtener beneficios extra a cambio del acceso a sus favores sexuales. Cuál es la clase en ventaja y cuál en desventaja en un intercambio es importante dentro del marco de los mercados biológicos. La asimetría entre las clases puede determinar la forma de los intercambios. En interacciones donde existe cierta asimetría –por ejemplo, entre los peces limpiadores y sus clientes- las víctimas pueden ser menos vulnerables a la explotación cuando tienen la posibilidad de terminar la interacción. En consecuencia, el explotador tendría más cuidado –y debería procurar no excederse- ya que la víctima tendría la posibilidad no solo de limitar la explotación sino también de eliminar la posibilidad de interacciones cooperativas futuras. Pero si la clase en desventaja no tuviera el control sobre la terminación de las interacciones la historia sería otra. El acicalamiento (grooming) en los primates puede ser considerado como una mercancía por los beneficios higiénicos y hedonísticos que proporciona a aquellos que lo reciben. En un estudio con babuinos chacma (Papio hamadryas ursinus) se encontró que los individuos pueden intercambiar acicalamiento de forma recíproca o bien, para tener acceso a otras mercancías como la manipulación de crías pequeñas. El tiempo que las madres eran acicaladas variaba en función del número de crías disponibles. Es decir, otros miembros del grupo estaban dispuestos a “pagar” con mayor acicalamiento cuando las crías escaseaban. Recientemente, Parry Clarke, Jo Halliday, Louise Barrett y Peter Henzi se preguntaron si la teoría de mercados biológicos podría también explicar el intercambio sexual entre machos y hembras del babuino chacma y si, en este caso, el acicalamiento también funcionaba como mercancía. Para responder a ésto utilizaron un montón de datos que obtuvieron en campo y varios modelos matemáticos; sus resultados fueron publicados a finales del 2010 en la revista Behavioral Ecology. En varias especies se ha visto que los machos intercambian ciertas mercancías o recursos para tener acceso a los favores sexuales de las hembras. Por ejemplo, los chimpancés intercambian alimentos a cambio de cópulas. De acuerdo con esto uno podría esperar que dichos intercambios respondieran a, por ejemplo, el número de hembras receptivas sexualmente en un momento dado y al número de machos que compitieran por ellas. Sin embargo, los machos podrían no estar interesados en intercambiar beneficios con las hembras si pudieran apropiarse de los recursos en discordia (beneficios sexuales) por la fuerza. En otras palabras, la coerción sexual puede ser una estrategia que eliminaría la necesidad de establecer intercambios cooperativos. Esto podría ocurrir en aquellas especies –como los babuinos chacma- en los que los machos son mucho más grandes que las hembras y, por lo tanto, pueden ejercer la coerción de forma más exitosa.
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Clarke, P., Halliday, J., Barrett, L., & Henzi, S. (2010). Chacma baboon mating markets: competitor suppression mediates the potential for intersexual exchange Behavioral Ecology, 21 (6), 1211-1220 DOI: 10.1093/beheco/arq125
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